De sales y martillos.

figura 1."salar"











Dicen que cuando uno se pega muchos martillazos en la cabeza,cuando se deja de hacerlo se siente un gran alivio...bueno,creo que no tengo deseos de averiguar si acaso eso es asi.
será lo mismo cuando uno se lava una herida llena de sal? de esa sal que no se echó para que la herida sanara,sino para que duela mucho mas.
me acuerdo cuando en casa las babosas entraban a la cocina.nunca supe quien les echaba sal.pero en la mañana eran solo espuma.
por suerte la sensación de sal en heridas solo es emocional...Claro,no faltará por ahí el imbécil que se aliñe las heridas por gusto.





desde que escribí la ultima frase han pasado unos minutos,he reflexionado y creo que si una persona se hecha sal o no en una herida es cosa de ella...la imbecilidad es un tema complejo la pregunta es: se nace imbecil? o la imbecilidad es conducta? una forma de ser? una forma de estar?
o la imbecilidad es potencia al nacer,y se va criando?
es culpa de las babosas que se llenen de sal?...No lo creo
pero si tomas un martillo para comprobar si es cierto lo que a mi me dijeron...es mia la culpa? es culpa del quien me lo dijo?
Así funciona todo...nos echamos la culpa entre nosotros
inventamos formas de crear dolor para sentir el extraño alivio.
eso es imbecilidad escribir acerca de esto es imbecil.
Creo que voy a ir al taller de mi papa...tomar un martillo....y a darle numas pos.
Alguien quiere martillarse la cabeza conmigo? tal vez yo lo pueda ayudar.