
Nunca supo que decir,cada vez que tenía que decir algo...Se quedaba callado Mario-neta no hacía nada sin que se encomendara antes al Sr de arriba todo era según su voluntad.
Para que mencionar cuando María se acerco por primera vez...no hizo nada sus hilos lo controlaban...Para el eso fue un gran alivio..jamás habia visto ni sentido lo que sintió ese dia por María-neta...Asi que siempre se dejaba llevar por esos hilos que lo controlaban
No tenía problema siempre todo fue asi...lo que los hilos nunca pudieron controlar fueron sus sentimientos por maría.
Un día su madera cambio extrañamente de color sus mejillas se habían puesto un poco mas rosadas y maria lo miraba en la caja donde se guardaban juntos..siempre con la misma cara.su boquita pequeña...sus ojitos negros tan negritos,el hubiese querido que ella lo mirara de verdad.su pelo era de lana negr y le llegaba cerca de los hombros...A diferencia de el.ella las cuerdas que le sujetaban las manos,pies y cabeza eran mas finos y se notaba que no estaba amarrada tan fuerte.Asi pasaba cada noche dentro de la caja sin ninguna otra cosa mas que mirar que a ella.pues por coincidencia quedaban sus rostros frente a frente.
El era un principe,ella una delgada mendiga que usaba un vestido a rayas rojo y blanco.
El usaba a cambio una corona,ropa blanca y por encima una chaqueta azul con rojo,una pequeña espada de cartón,un cinturón dorado y unas botas color marrón.
Era imposible que en la obra diaria los de arriba decidieran cambiar el final de la obra...el ya tenia un hermosa princesa,habia tenido que matar a un dragón y romper un hechizo..Asi fue siempre...Porque habria de cambiar???Maria siempre fue secundaria...
Esa noche ocurrio algo extraño.En el rostro de Maria se esbozaba una sonrisa.
como expresarle que su madera se quemaba por solo decirle cuanto la amaba.
Todo el tiempo que paso solo se dedico a intentar moverse por sus propios medios.
un amor-odio lo inundaba hacia quienes lo manipulaban sin ellos solo seria un muñeco
Como envidiaba sus movimientos,su voz,su risa...la risa de la gente que lo observaba cada dia...
asi pasaron los meses..los años.
Sus dueños, unos titiriteros que viajaban por los pueblos habian decidido dejar su trabajo...quien controlaba la princesa iba a traer al mundo un nuevo ser.
y ellos? como nacían? Quien los traia al mundo?
El pobre Mario nunca dejo de amar a su pequeña títere.
No tuvo el valor de cortar los hilos no sabia que habia mas alla de esas cuerdas que le daban movimiento...y su único consuelo fue observarla cada instante dentro de la caja que los contenía ...
1 comentario:
Hermoso cuento.
pobre mario jamas será feliz.
a quien le importa lo que siente un muñeco???
Lo habrá querido maria tambien?
quien sabe..el pobre se va a quedar con la duda toda su titiritesca vida.
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